Valle del Alagón

¿Sabes dónde estamos?

Cuando viajes por esta comarca verás un paisaje formado por dehesas de encinas y alcornoques, espacios donde habitan importantes ganaderías de toros bravos. También son abundantes los cultivos de regadío, sin faltar los olivares y las zonas de montaña.

Al caminar por las diferentes localidades descubrirás antiguas fiestas, podrás comer ricos platos y visitar interesantes monumentos. Es muy agradable realizar alguna ruta por senderos señalizados, observar aves o comprar objetos típicos de artesanía para regalar a tu familia y amigos.

Adéntrate en la naturaleza

Pronto te darás cuenta de que la naturaleza, los edificios históricos y las tradiciones populares son los grandes protagonistas en el Valle del Alagón, donde existen leyendas como ésta:

"Cuentan que en Calzadilla y alrededores, hace más de trescientos años, apareció un lagarto de gran tamaño que tenía asustado al pueblo pues se comía las ovejas y atacaba a los pastores. Un día Colás, un pastor que cuidaba a sus ovejas, se topó con este enorme lagarto y pidió al Cristo de la Agonía de Calzadilla que le ayudase a acabar con el animal. Y el Cristo le protegió pues hizo un milagro: convirtió el bastón del pastor en escopeta y así pudo matarle. Cuando murió, la escopeta se rompió y Colás escucho una voz que decía: "¡Rota quedarás para que a nadie mates más!". Colás, muy contento por lo que había sucedido, dio las gracias al Cristo de la Agonía regalándole como ofrenda la piel del lagarto. Hoy, parte de esa piel puedes verla en la ermita del Cristo, en Calzadilla"

El Valle está recorrido por el río Alagón, afluente del Tajo, y por numerosos riachuelos y arroyos. El Alagón atraviesa Coria y allí puedes pescar o realizar deportes en el agua. No te olvides de los embalses de Valdeobispo y Portaje donde practicar deportes náuticos y pesca. Además, el embalse de Portaje es un pequeño humedal artificial de gran importancia ornitológica por su interesante avifauna acuática. Por otra parte, la comarca comparte con su vecina Sierra de Gata el embalse de Borbollón, un verdadero dormidero de grullas.

Existe una zona natural llamada Conchos de Ramiro y Ladronera, muy interesante por la variedad de vegetación y, sobre todo, porque habitan diferentes aves que podrás localizar desde los miradores.

Te recomendamos que realices el Sendero de los Rebollares, sobre todo si es otoño porque la ruta que une las poblaciones de Aceituna y Montehermoso, recorre un precioso bosque de hoja caduca donde predominan los colores verdes, ocres y rojizos. Este sendero de 14 km. puedes recorrerlo en bicicleta, caminando o a caballo.

Si te gustan los ciervos, en el Rebollar de Calzadilla, durante el otoño, tiene lugar la berrea: en época de reproducción los ciervos machos realizan sonidos para atraer a las hembras.

Un viaje a través de la historia

Los romanos ya habitaron esta comarca y prueba de ello son los restos de la calzada que construyeron, conocida como Vía de la Plata. Localidades como Carcaboso forman parte de este antiguo camino. Visita el Centro de Interpretación de la Vía de la Plata y aprenderás más sobre esta etapa histórica. Coria es otra localidad del Valle que cuenta con importantes restos romanos, por ejemplo su muralla, levantada para proteger el poblado de las invasiones.

Fue en el siglo XII, ya en la Edad Media, cuando los almohades construyen en Galisteo las murallas, fabricadas con cantos rodados. Cien años después se levanta, también en Galisteo, el ábside o cabecera que verás en la iglesia de Ntra. Sra. de la Asunción. Se trata de un ábside mudéjar, nombre con el que se conocía a los albañiles musulmanes que trabajaban en zona cristiana.

Si prefieres ver el templo más importante del Valle del Alagón y de gran parte de la provincia de Cáceres, visita la Catedral de Coria, que pertenece a la Diócesis de Coria-Cáceres. La Diócesis es el territorio donde ejerce su actividad el obispo.

Como la provincia de Cáceres es la segunda más extensa de España, su amplio territorio obligó a que, en lugar de haber una catedral, existan dos: una perteneciente al territorio de Coria-Cáceres y la otra de Plasencia.

Entra en la catedral y disfruta de sus obras de arte, muchas de ellas en el Museo Catedralicio y no te olvides de subir a la torre-campanario, donde tendrás una bonita vista de Coria y alrededores.

Te recomendamos que en Coria pasees por su centro histórico donde verás palacios y conventos donde comprar ricos dulces realizados por las monjas. También puedes visitar el Museo de la Cárcel Real.

Sabías que...?

En la localidad de Calzadilla, sus habitantes son conocidos como "lagartos", de ahí el gran monumento levantado a este reptil

Pozuelo de Zarzón tiene grandes extensiones de olivos y sus aceitunas producen uno de los mejores aceites de oliva ecológicos.

Montehermoso tiene un Museo Etnográfico donde aprenderás las costumbres, vestidos y utensilios que utilizaban para trabajar en épocas pasadas.

A los vecinos de Valdeobispo se les llama "esparragueros" por la habilidad que tienen recogiendo espárragos trigueros.

En la comarca de Valle del Alagón hay fiestas muy importantes y conocidas. En Acehúche se celebran Las Carantoñas, los días 20 y 21 de enero; en Montehermoso, Los Negritos de San Blas, el 2 y 3 de febrero; en Coria, a partir del 24 de junio ,Los Toros de San Juan y en Torrejoncillo, la noche del 7 al 8 de diciembre, La Encamisá.

En Montehermoso se realizan enormes campanas de bronce fundido y la colorida y famosa gorra de montehermoseña, la llevaban las mujeres cuando vestían con el traje típico de la localidad.

En Ceclavín, los artesanos fabrican con sus manos vasijas y cántaros de barro con incrustaciones de pequeñas piedras, es lo que se conoce como cerámica del enchinado.

En Valdeobispo apareció un collar y cuatro pulseras de oro, realizado por los tartesos, se conoce como tesoro de Valdeobispo. Perteneció al ajuar de una novia de alta clase.